EUGENI FORCANO

Jorge Rueda

Eugeni, amigo:

Nos hemos visto poco, pero seguro que vamos tropezando por la vida con brisas de ella que han movido nuestras carnes al unísono. Quizá esa sea la sintonía. Tienes tras de ti otros años, otras tierras, otra gente. Pero siento que los dos somos víctimas, con otros, de este profundo desarreglo.

Te miro con asombro, Eugeni. Estas tan vivo a tus sesenta años que, por fin, has conseguido fotografiar los suspiros. Yo no quiero que me cuentes, ni nos cuentes, cómo has conseguido fotografiar los suspiros. Es tu suerte. La mía es verlo luego cuando tú lo muestras. Pero has pasado tanto tiempo persiguiendo luces, que te mereces seguir siendo pionero y puedes permitirte el lujo de decir que tienes prisa y que la vida es breve…

EUGENI FORCANO, NUEVA FORMA DE EXPRESIÓN FOTOGRÁFICA

Lluis Permanyer

La Vanguardia, domingo 27 de octubre de 1985. Pg. 35

La fotografía es un arte bien joven y el camino por recorrer es de unas posibilidades inmensas. Mientras algunos fotógrafos se aplican a trabajar la belleza plástica mediante técnicas conocidas, otros se empeñan en descubrir formas de expresión…

Forcano ha dado con un sistema de expresión en el que no hay más que la luz, y también el azar. El artista provoca que las imágenes vayan mandando, y entonces se aplica a escoger aquellas que de algún modo causan impacto en su sensibilidad.

El estilo que le ha caracterizado siempre ha sido un surrealismo muy personal, a menudo inspirado en la manera de hacer tan peculiar e imaginativa de Magritte.

LO QUE QUEDA DESPUÉS DE LA LUZ.

Javier Pérez Andujar

EL PAÍS, martes 3 de marzo de 2004

En las escenas de Forcano, la vida pasea por los mercados, y solo se detiene la vida cuando se desespera, y entonces hay gente que se pone a hacercola ante las puertas de las iglesias pidiendo el milagro (“como buen charnego, yo estoy bautizado en la catedral”, dice con media sonrisa). Pero la vida reanuda su marcha y los curas salen de la sacristía y pasean sus sotanas por la calle bajo carteles publicitarios para que Forcano los fotografíe también a ellos.  Hay gente en sus fotografías que parece dirigirse a ninguna parte porque en la vida sólo les queda la dignidad y la llevan inquebrantablemente encima (una de sus fotos que muestra a un viudo vestido de un luto modesto e impecable, con barba unamuniana, me puso a temblar). Las gentes de estas fotografías van a veces con prisas, otras andan despacio y algunos se arrastran de rodillas por las procesiones. Es siempre gente que va y viene sin cesar, porque lo que se mueve está más vivo que lo quieto. “A mí lo que me gusta es la gente. Cuando veo que se va a producir un momento de la fotografía, se me dispara el corazón y a la vez disparo la cámara”, y al oírle también se me dispara a mí el corazón porque la emoción es lo más contagiosa de las sensaciones.

DIFÍCILES Y PRODIGIOSOS 60: LA PASIÓN POR LA LUZ

Lluís Permanyer

La Vanguardia Magazine, 27 de marzo de 2005. Pg. 44

Eugeni Forcano sintió pronto la llamada de la fotografía; de ahí que la practicara siguiendo intuiciones propias del autodidacta. El arte de la luz lo llevó a Paris: cierto que allí descubrió obras maestras, pero no le influyeron en demasía. Poco a poco descubrió su estilo y personalidad, que le llevó a formar parte de la generación que se amalgamaba a la sombra e l ya respetado Català Roca. Forcano, con todo, nunca se encuadró en grupo alguno e hizo de la independencia un programa, el que le llevara a expresarse con voz propia…

El sello Forcano es el de la emoción y hasta el de la pasión, que sabe volcar en la obra sin violencia…

HOMENAJE AL MAESTRO FORCANO

Josep María Espinas

El Periódico, Barcelona22 de abril de 2005.

Acaba de salir un libro dedicado a Eugeni Forcano. Le hará justicia – la justicia es lenta, ya se sabe -, porque Forcano ha sido un fotógrafo fuera de serie…

Curiosamente, Forcano es un audaz experimentador de laboratorio, autor de composiciones que nacen de combinar la luz y colores. Pero yo tengo muy presente la `persona, el Forcano con quien recorrí Catalunya para hacer un libro sobre las fiestas mayores. Y entonces descubrí la increíble autoridad que podía tener un hombre con una cámara de fotos. Forcano era capaz de conseguir que le abrieran la puerta de un tercer piso, sacar del balcón a los dueños del piso que miraban el espectáculo para asomarse él y poder hacer la foto de la plaza. De repente decía: “necesito una escalera” y salía disparado como una flecha. Y al cabo de tres minutos volvía con una escalera que no sé de qué portería o tienda había sacado. 

¡Cuántas cosas muestra y cuántas cosas esconde este libro de fotos! Con mi admiración, Forcano.

LEÓN EN MINIFALDA

Ana Gaitero

Diario de León, 26 de febrero de 2012

La atrevida mirada de Eugenio Forcano trastocó el paisaje leonés a finales de los años 60 con sus fotos para los catálogos de moda de la empresa Tilsa. Monumentos señeros, minas y pantanos se vistieron de minifalda.

Con la cámara Hasselblad en ristre fue directo a la Catedral y sin encomendarse al Cabildo subió a las modelos a las verjas de la Pulcra Leonina y las hizo encaramarse a la portada, en osada competencia con las esculturas góticas. 

El fotógrafo recuerda la experiencia con emoción y describe los objetivos que buscaba como si fuera a emprender de nuevo el trabajo: «El paisaje me gustó muchísimo y me encontré con un clima de especial humanidad. Buscábamos la parte rural de León e intentábamos incorporar a la gente del pueblo. Gente auténtica a la que me gustaba mezclar con la innovación de la moda. La gente del pueblo es la verdad de un país». Una idea que resultó irreverente y provocadora para otros. El 11 de julio de 1968 apareció en la portada de DIARIO DE LEÓN una de las fotos que realizó Forcano para el segundo catálogo. Una joven modelo rubia con boina sobresalía por encima del rostro arrugado, pero no menos hermoso, de una anciana con pañuelo negro y sonriente. Al día siguiente se presentan ante Forcano dos policías que le entregan una carta: «Es de un teniente coronel que me dice que la anciana es su madre y que considera la foto como una falta de respeto». Forcano le responde por todo lo alto: «Le dije 

EUGENI FORCANO, PREMIO NACIONAL DE FOTOGRAFIA

Antoni Ribas Tur

Diari ARA, 27 de noviembre de 2012

El ministeri de Cultura ha reconegut un dels degans de la fotografia catalana. El fotògraf Eugeni Forcano va ser distingit ahir amb el Premio Nacional de fotografia per "l'extraordinària qualitat del seu treball, la perdurabilitat de les seves imatges i la seva capacitat d'innovació i experimentació", així com també per la seva llarga trajectòria i la seva tasca d'investigació i experimentació, diu l'acta del jurat. Forcano, tal com va dir després de rebre la notícia, està sorprès i molt emocionat, perquè no esperava aquest reconeixement a la seva "escandalosa edat". Forcano, que va néixer a Canet de Mar el 1926, va subratllar que la seva obra és "emotiva" i que interessa a la gent senzilla. "El meu objecte és la gent anònima que no té veu", va dir el fotògraf, a qui La Virreina va dedicar una important retrospectiva el 2005 titulada Eugeni Forcano. Fotografies 1960-1996.

FORCANO MODA. 

Manuel Outumuro

Forcano Moda. Trets de moda sota la genial mirada d’Eugeni Forcano. Ed. Museu Tèxtil Terrassa, 2022.

El gran acierto de la obra fotográfica de Forcano para la moda ha sido mantenerse fiel a su manera de fotografiar. Sesión tras sesión, todas por encargo, logro que sus fotografías mantuvieran el sello inconfundible que reafirmaba la identidad de su obra.

De todas esas colaboraciones, quizás el binomio más logrado, fue el que se estableció con Tilsa (Textil Industrial Leonesa, S. A.) en 1968. De esas sesiones salieron las imágenes más interesantes de Forcano moda. Muchas de esas fotografías transmiten una libertad propia de quien se enfrenta a un proyecto fotográfico sin muchas pautas y con una gran libertad. En la historia de la fotografía de moda en nuestro país, que algún día tendrá que escribirse como se merece, estoy seguro que esa serie de imágenes ocuparán un lugar destacado. El hecho de fotografiar, no a la modelo sola, como era normal en ese momento, si no de acompañarla de personajes de la clase trabajadora: mineros, campesinos, empleados de la propia fábrica, etc. dota a esas fotografías de una fuerza inusual.

La colección de fotografías de Forcano para el mundo de la moda son disparos de una gran vitalidad y de una puesta en escena un tanto surrealista, un movimiento artístico que fascinaba al fotógrafo. La genialidad de la mirada de Forcano idealiza y plasma la moda magistralmente, no solo fotografiando el producto, si no también, aportando una lectura social del entorno donde fue creado.